La producción de películas internacionales en Ciudad de México es uno de los motores del turismo en la ciudad, fuente con mucho potencial para el ingreso de recursos. La Comisión de Filmaciones de CDMX produjo el folleto A Cuadro, que promueve el disfrute de la capital de México con el fin de conocer estas locaciones, y en días pasados organizó una visita guiada, en el marco de Mestizo Lab, a cargo del cronista de la ciudad, Francisco Ibarlucea. La idea es promover más visitas centradas en el turismo cinematográfico.
Ibarlucea afirma que Spectre, de la saga de Jame Bond ( 2015), con Daniel Craig en el papel principal, es de las que más impactaron al turismo en CDMX, tras sus primeros cinco minutos, con el desfile del Día de muertos. De hecho, este desfile que no se hizo nunca en el pasado, se hace ahora cada año en Día de muertos luego de la película y se ha convertido en un símbolo de la ciudad y atracción para el turismo.
“Los guías de turistas decimos que son los cinco minutos de publicidad sobre Ciudad de México más potentes que han hecho en la historia. A partir de ese momento se incrementó en 30% el turismo en la Ciudad de México. Usualmente, cuando salimos con grupos a explicar el patrimonio, preguntan, ¿Dónde fue la explosión de Spectre?” comentó Ibarlucea.
Spectre fue motivo para ir visitar El Palacio de Correos y la plaza Manuel Tolsá, que ambos se ven desde el desfile, para admirar el restaurante Los Girasoles, arriba de cuya cornisa corrió Daniel Craig, para llegar al punto donde explota el edificio de enfrente, y luego caer él en un sofá. “El edificio que explotó ya estaba en ruinas. Allí estaba el teatro Fru Fru, en la calle Donceles, que estaba abandonado, pero que a partir de la película empezó a renacer. Es muy interesante la economía que se generó a partir de esa película” explicó el cronista.
La escena del Gran Hotel, de donde sale Daniel Craig antes de montarse en la cornisa, está en la calle 16 de septiembre. En la película también se ven sus hermosos elevadores originales, y el techo con su vitral. Sin embargo, está locación está ubicada a unas cuadras de la plaza Manuel Tolsá, pero en la película hace ver que sale de allí hacia el lugar de la explosión. El Gran Hotel de la Ciudad de México es otra locación emblemática, donde en 1994 se hizo Missing (1982) y Bad Boys (2019) con Will Smith, donde se ocupó la parte del restaurante.
Diana Segoviano, quien hoy dirige la Comefilm, recordó que en aquel momento fue quien se encargó de tramitar los permisos para esa película. “Esa calle, donde ocurrió la explosión, estuvo cerrada un mes, con una grúa tirando pedazos para simular que había explotado el edificio. Hubo un acuerdo con los vecinos para que pintaran y resistiera el efecto de que caía. Y en la calle de Filomeno Mata, dieron alimentación a los tres mil extras, los cuales se vestían y maquillaban en Tlatelolco, donde los citaban a las 3 de la madrugada, para luego traerlos en autobuses. La película mantuvo cerrado por 15 días al centro de la ciudad, en Semana Santa de 2015. Se cerró todo el Zócalo, las calles Filomeno Mata, Tacuba y Donceles. Se acordó con la producción que pagara una compensación a los comerciantes que dejaron de percibir ingresos todo ese tiempo” explicó Segoviano.